Sede de la CNT-AIT de Fraga |
Comunicado
de la CNT-AIT Federación Local de Fraga
No a la guerra, no al militarismo. Contra todo imperialismo
Ni Putin, ni Biden
Ante los escalofriantes sucesos derivados de la invasión de Ucrania por las Fuerzas Armadas de la Federación de Rusia no podemos permanecer calladxs por más tiempo. Creemos que este es el momento en que debemos alzar nuestra voz, la voz del humanismo, por encima de cualquier otra cuestión. Y es que no somos expertxs en geopolítica, ni tan siquiera aficionadxs; no somos expertxs en reservas energéticas, ni industriales, ni agrícolas. De hecho, no somos expertxs prácticamente en nada, solo de nuestro oficio y labor como obrerxs que somos, y eso es precisamente lo que creemos que nos da la legitimidad de poder lanzar una arenga vacía de violencias y asentada en la realidad de las personas comunes, de la clase trabajadora. Porque esto, aunque nos cuenten otra cosa, no va de patrias, ni territorios históricos esto va de capitalismo y el odio exacerbado de este sistema hacia las personas, odio que se deriva del afán de ganar más y más dinero, y más y más poder.
Nos pueden contar que el malo es uno u otro, pero la realidad está siendo mucho más simple: la realidad, una vez más, es aquello que sufre la clase trabajadora independientemente de su nacionalidad: muerte, sufrimiento, exilio…
No nos dejamos engañar por quienes banalizan el fascismo y el nazismo calificando a unos o a otros, según convenga, de nazis o de fascistas. Porque esto va, una vez más, de capitalismo. Nadie que esté a favor de la guerra es el bueno en este cuento. Nadie que se llene la boca pidiendo muerte puede ser el bueno de nada. De nada sirve apelar a unos bloques políticos ya desaparecidos, para justificar determinadas posturas. Putin no es comunista. Biden no es pacifista. Y a uno y al otro les importa poco la democracia. De hecho, están cortados por el mismo patrón. Uno y otro sirven, cada uno a su manera, a la oligarquía de los negocios. A ese 1% que domina el mundo con su capital y que tienen la desfachatez de hablar de los beneficios económicos de la guerra, obviando el sufrimiento que esta provoca.
Personas ucranianas y personas rusas y personas de cualquier otra parte del mundo son nuestras hermanas; hermanas de clase y a ellas nos debemos, por ellas alzamos nuestra voz para seguir gritando: ¡NO A LA GUERRA! ¡NO AL MILITARISMO! gobierne quien gobierne.
Basta ya de matarnos para hacer vuestros sucios negocios. Basta ya de vuestros negocios. Alcémonos la clase trabajadora por nuestra propia emancipación y vaciemos de poder a esta caterva de cobardes y mentalidad criminal que gritan pidiendo guerra, siendo incapaces de ir ellos mismos a entregar su vida por nada ni nadie.
Dejemos de pensar en los términos que el sistema de dominación nos marca e impone y pensemos en el mundo nuevo que podemos construir: libre de violencias y en donde todas las personas seamos hermanas. Abandonemos el mercantilismo y la mercantilización de la vida. Pero mientras llega ese momento gritemos con una sola voz:
¡PARAD LA GUERRA! ¡PARADLA, YA!
¡NI PUTIN NI BIDEN!
¡NO A LA OTAN!
Fraga
27 de Febrero del 2022
No hay comentarios:
Publicar un comentario